rata cobardica

Odio la incertidumbre, odio no saber.
No saber lo que quiero. Ninguna de mis opciones me satisface.
Es tan difícil saber que es mejor.
Voy a disfrutar tanto leyendo este blog cuando tenga 30 años. Riéndome de lo idiota que era.
Pero lo cierto es que estoy agonizando. Necesito decirle a alguien como me siento.
A una persona de verdad, no a un estúpido blog.

Rubén es la causa de mis problemas,
y romper con él sería la solución.
Pero no puedo, siempre hay algo que me lo impide.
Cuando es lo quiero, cuando pienso que es el momento de hacerlo,
que puedo, cuando el me pregunta qué me pasa o que es lo que pienso en ese segundo.
Siempre digo nada.
Y es que le amo, lo sé.
Pero este amor me destroza.
Y no es justo, para ninguno de los dos.